Cómo Planchar Sábanas Rápidamente

Las arrugas en las sábanas de la cama no solo son frustrantes, sino que también le dan un aspecto desordenado y desagradable tanto a la cama como a la habitación. Para muchas personas ya esto es ir demasiado lejos en el planchado, pero estoy seguro que en un hotel sí disfrutan de una cama bien tendida. Ese efecto es producido gracias a un buen planchado. Ciertamente, si en casa a duras penas planchamos un par de camisas y pantalones una vez por semana, es poco probable que nos interese planchar sábanas de algodón o lino.

Pero, aunque no lo creas, para alisar la ‘ropa’ de la cama no se requiere de un don especial ni grades dotes con el fin de replicar el efecto conseguido en las camas de hoteles. ¿Todavía no sabes cómo planchar sábanas? El procedimiento ideal para deshacerse de las arrugas dependerá en primer lugar del material con el que estén fabricadas, bien sea lino, algodón o sábanas de franela y, por otro lado, si han sido lavadas apropiadamente. Con tan solo seguir un par de instrucciones conseguirás que las sábanas se conserven libre de arrugas sin importar que las uses de una vez o las guardes para después. Lo puedes comprobar tú mismo siguiendo los pasos a continuación:

Lavado adecuado

como planchar sabanasPara obtener cualquier resultado positivo, primero que nada, las sábanas deben estar bien lavadas, preferiblemente bajo los efectos de un delicioso suavizante que ablande las fibras de los tejidos de la sábana ya que, además de dejarle un rico aroma, está menos propensa a arrugarse demasiado durante el secado. Otra cosa, tan pronto el ciclo de secado haya terminado, retira las sábanas del interior. Mientras menos tiempo tardes en sacarlas, minimizas mucho más la cantidad de arrugas formadas o por lo menos, que no sean demasiado fuertes.

Colocar en la mesa de planchado

La superficie de las mesas de planchar no es tan extensa como para que podamos extender toda la sábana en ella, obviamente. Esto dificulta un poco el planchado, evidentemente, pero no es imposible. La mejor alternativa es dejar encima la sección que se va a planchar y el resto mantenerla doblada. Mientras avanzamos se va desdoblando por un lado la parte arrugada, y el otro extremo lo vamos doblando nuevamente. No es tan práctico como se desearía, pero funciona. Lo que sí es muy práctico y notablemente más rápido es que la propia cama sea la mesa de planchar.

Es una opción completamente válida, aunque requiere ser muy cuidadoso con el colchón. Primero hay que estar 100% seguro de que el colchón resista la misma temperatura que tu sábana para evitar daños sumamente costosos. Esta opción viene mucho mejor para las bajeras, ya que por su forma y la elástica en su interior es mucho más complejo descifrar cómo planchar una sábana bajera.

Almidonar

El almidón se utiliza con cualquier prenda de vestir, aunque de manera más facultativa. No obstante, para planchar sábanas, el almidón es remarcablemente más determinante para conseguir una apariencia y textura consistente, esa que tanto se disfruta en las camas de hoteles. Este se puede decir que es el gran secreto. Entonces, primero esparcimos con el atomizador y dejamos reposar por un par de minutos antes de aplicar el calor de la plancha. El almidón, además de facilitar la eliminación de arrugas, también contribuye a que las sábanas cojan una textura definida impidiendo que se formen arrugas una vez más. Si quieres sábanas que no se arrugan con tanta facilidad, no puede faltar en tu mueble de planchado el atomizador con almidón.

Precalentar la plancha

Después de que se haya reposado el almidón precalentamos la plancha a una temperatura adecuada de acuerdo al material de las sábanas. Como referencia, la temperatura más baja es para tejidos como la seda, en contraste, para planchar lino o una sábana hecha de algodón se puede seleccionar una temperatura mucho más elevada ya que estos tejidos toleran bastante mejor el calor intenso.

Planchar

planchar linoFinalmente llegamos al momento de planchar. Si cuentas con una plancha a vapor, es muy factible comenzar rociando bastante vapor para suavizar y disolver arrugas más superficiales. Desliza la plancha de un lado a otro ejerciendo una leve presión hasta haber terminado.

Las planchas verticales igualmente son una magnífica herramienta que simplificará el trabajo. Basta con conseguirle un espacio donde colgar la sábana y aplicar los fuertes golpes de vapor que desaparecerá cualquier arruga.

Pero nos está faltando algo muy importante… ¡Las fundas! Son la cereza del pastel. Son precisamente las fundas donde recostamos la cabeza y donde percibimos la mayor sensación de comodidad y confort. Por otra parte, una almohada bien esponjosa y suave es el complemento perfecto para que nuestra lencería se vea y se sienta de maravilla. Tal cual hicimos con sábanas y bajeras, realizamos idéntico procedimiento con las fundas; dejar reposar el almidón en el tejido y planchar a la temperatura correcta.

Si estás corto de tiempo para invertir en este trabajo, no te desanimes porque no está todo perdido. Todavía hay maneras de que tus sabanas se vean y sientan mejor, por ejemplo:

  • Planchar sobre la misma cama, como ya lo explicaba al principio del texto. A pesar de que los resultados no son los mismos, este método ahorra muchísimo tiempo. De igual manera se puede aplicar almidón, sin embargo, hay que velar por el colchón. En cuanto a los resultados, al tacto se siente igual, pero visualmente casi no aparece la apariencia de una cama esponjosa que nos llama para acostarnos a dormir.
  • Si el tiempo apremia, pero aun así necesitas que tu cama luzca mejor para una visita, también se puede optar solo por planchar las fundas. Al fin y al cabo, las almohadas son las que le otorgan al usuario la mejor comodidad. Si sobra un tiempito adicional, por lo menos, el tercio superior de la sábana se puede planchar porque es la zona más visible y que entra más en contacto con nuestro cuerpo.

 

Otras lecturas:

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)
¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)
Botón volver arriba